Anotaciones Empíricas, de Ocurrencia Esporádica y Naturaleza Ecléctica

Campeón

Se acabó la magia, en realidad se había acabado hace rato, la tarde del 28 de junio comenzó—a mi entender—el cambio de pigmento de dorado a gris. Luego vino Alemania, perdimos 1—0, Paraguay, perdimos 0—3, Bolivia, perdimos 1—0, le ganamos a Ecuador 2—1 y Brasil nos terminó de matar con un 0–3.

La famosa copa Confederaciones finalmente nos perjudicó demasiado, jugadores cansados, aburridos, cabreados.

Pero también perdimos el rumbo por ser el centro de atención luego de las dos copas Americas ganadas, probar el nectar de los campeones nos emborrachó (y no es metáfora).

Como nunca habíamos sido campeones de nada nos mareó la altura, perdimos el equilibrio y caímos en el pozo de la decadencia, no sin antes pasar por el peluquero.

Ahora habrá que comenzar de nuevo, ya sabemos lo que es ganar y lo que no se debe hacer ni beber cuando se está en la cima.

Leo y escucho pesimismo de que no hay recambio, quizá, puede ser, pero al menos ahora podemos motivar a quién sea que tome el testimonio con un: «se puede, con trabajo duro, se puede».